Amelia Mary Earhart nació en Atchison, Kansas, EUA el 24 de julio de 1898 y desapareció volando sobre el Oceáno Pacífico el 2 de julio de 1937. Ocupa un lugar destacado en la historia de la aviación, un mundo asociado tradicionalmente a los hombres (los hermanos Wright, Charles Lindbergh, Howard Hughes). Impuso muchas marcas e intentó hacer el primer viaje aéreo alrededor del mundo sobre la línea ecuatorial, y estuvo a punto de lograrlo.
Desde pequeña mostró un carácter inquieto y audaz. Durante la Primera Guerra Mundial ella y su hermana Muriel fueron como voluntarias a una enfermería en Toronto, Canadá, atendiendo pilotos heridos en combate; ahí visitó el Cuerpo Aéreo Real y se interesó por la aviación. Voló por primera vez en 1920 en una ascensión de 10 minutos en Long Beach, California y comentó: “Cuando ascendí hasta los sesenta o noventa metros supe que tenía que volar”.
Earhart quería volar y Neta Snook, considerada pionera de la aviación femenina, le enseñó a hacerlo. Después de conseguir su licencia en 1923 y formar parte de la Asociación Aeronáutica Internacional en 1927, Earhart empezó a ser reconocida como uno de los mejores pilotos estadounidenses. Ese mismo año conoció a quien sería su esposo, George Palmer Putman, a quien la millonaria Amy Guest había encargado organizar el primer vuelo femenino sobre el Atlántico en donde ella sería la protagonista, pero disuadida por su familia, buscaron a Amelia para hacerlo. Earhart se convirtió así en la primera mujer en cruzar el Atlántico saliendo desde Terranova (Canadá) hasta Gales (Escocia). Amelia alcanzó muchos otros récords: la primera mujer en volar a más altura, la mujer que alcanzó más velocidad y la primera persona que voló en solitario entre Honolulú (Hawái) y Oackland (California), y de Los Ángeles (California) a Ciudad de México (México) y a Newark (Nueva Jersey).
En 1935 empezó a planear un viaje alrededor del mundo, de lograrlo marcaría 2 hitos: la primera mujer en hacerlo y la mayor distancia posible circunnavegando la Tierra en el Ecuador. Escogió a Fred Noonan como su compañero de viaje quien había trazado varias rutas a través del Océano Pacífico y dos tripulantes más. Y eligieron el bimotor Lockheed Electra 10E para volar. El primer intento lo hicieron el 17 de marzo de 1937 volando de Oakland hacia Hawái, pero cuando despegaban ya en Pearl Harbor el aeroplano se deslizó fuera de control. Hubo que reparar la nave y 2 de los tripulantes desistieron.
El 21 de mayo de 1937 el Electra salió de Los Ángeles hacia Florida. El 1° de junio volaron de Miami a San Juan de Puerto Rico, de ahí a Caripito en Venezuela, bordeando la costa este de Sudamérica cruzaron hasta África y de ahí al Mar Rojo, donde volaron por primera vez entre el Mar Rojo y Karachi, capital de Pakistán. Llegaron a Calcuta en la India el 17 de junio, después se dirigieron a Rangún en Birmania, Bangkok, Singapur y Bandung en Java occidental, donde hubo algunos retrasos por mal tiempo además de que Amelia enfermó de disentería.
60 años después, en 1997, la piloto Linda Finch quizo recrear el último vuelo de Amelia alrededor del mundo como un tributo titulado “World Flight 97”, Finch siguió la misma ruta y completó el viaje con éxito. Amelia tenía razón.
La desaparición de Amelia y su experto coopiloto Fred y el Electra provocó numerosas especulaciones, pero sea como fuere, sigue siendo un misterio por resolver.
Amelia ha sido sin duda una de las mujeres más valientes que han existido, con todo el valor y coraje que una mujer puede tener para alcanzar sus sueños. Logró muchas cosas excepto su mayor sueño de completar su vuelo alrededor del mundo, pero con todo lo que hizo su legado es un ejemplo para animarnos a nosotras a luchar por alcanzar nuestros sueños.
Por Claudia Plasencia para: www.asdeporte.com